Acostarte a las 5 de la mañana después de un tiempo de “adulto” con amigos y algunas copas de más, para despertarte a las 8:00am con los gritos de 4 niños que pasaron por arriba de ti literalmente para abrir sus regalos del niño Jesús/San Nicolás…… no es exactamente el despertar que tenía en mente el 25 de Diciembre del año 2016.
Visitar a una amiga querida en Londres fue el escenario que inspiró semejante valentía……ella como mamá de dos me decía: “hay que irnos a dormir”, y yo como mamá de un niño de poco más de un año le decía “hay que aburrida”……. el caso es que en la mañana del 25 de Diciembre realmente descubrí un nuevo significado en esto que yo llamo: “Cuidar tu Energía”.
Es posible que ya tus hijos estén grandes, o que no tengas hijos, o que la excusa que te hace observar tus niveles de energía sea el exceso de trabajo…… de cualquier forma, todos en algún momento elegimos cosas de las que luego nos arrepentimos ¿cierto?, y la razón por la que quiero hablarte de esto en los primeros días del estreno del 2018, es porque “Cuidar mi energía” es una de mis prioridades top de este año, y honestamente creo que todo líder comprometido con su crecimiento le viene bien incluir reflexiones sobre esto ¿Qué opinas?
¿Qué es cuidar mi energía?
- Escuchar la estación o ciclo en el que me encuentre en mis emociones, mente y cuerpo, para elegir si quiero ir al mundo externo, o quedarme en mi mundo interno.
- Discriminar mejor cuando aún cansada sumo más actividad a mi agenda (que podría darme paradójicamente más energía porque son actividades que me apasionan), versus cuando sólo se trata de los vestigios de mi mente ex-workaholica (obsesiva por el trabajo), queriendo hacer siempre más.
- Decir no cuando se siente bien para mi, aunque no se sienta bien para otros.
- Ser flexible con mis estándares como mamá, y fluir con la guía que me marca mi hijo, (esto también puede aplicar a una relación de pareja, con un compañero de trabajo, con tus padres o familiares). Por lo general siempre tenemos un ideal o estándar de cómo queremos que sean las cosas y cuando nos aferramos causa tensión.
- Revisar con mi cuerpo si cuando soy flexible con los alimentos que llevo a mi boca (comer cosas no regulares en mi dieta), mi cuerpo está más contento o pasa luego horas o días en dificultad.
- Ser humilde y no pelearme conmigo por encontrarme en un nivel de principiante en nuevos proyectos, deseos y aspiraciones.
- Darme cada vez con más entusiasmo el permiso para descansar cuando no fluye la creatividad o no encuentro la solución que busco a un problema.
¿Cómo ves?……¿Te identificas con alguna?
¿Pensaste que te iba a hablar sólo de alimentación, o dietas, o tal vez de ejercicio?
Aprender sobre mis niveles de energía, ha sido una aventura tipo montaña rusa, en ocasiones me siento en la cúspide con mi ego inflado por tener energía y entusiasmo para todo, y en ocasiones me siento como en caída libre mirando el reloj cada hora para ilusionarme con que llegue la hora de terminar el día porque ya me siento frita de cansancio (tiene mucho que ver con el malabarismo entre la distribución de tiempos de mi rol de emprendedora y mamá).
Como ex-atleta de alto desempeño, estos temas de como maximizar mi energía para tener un mejor rendimiento siempre me han apasionado, y lo que hoy puedo decir como líder de mi vida, es que para aprender sobre tus niveles de energía sólo se requiere el deseo de hacerlo, y el compromiso de detenernos a crear espacios para realmente escucharnos, y buscar el apoyo que se necesite de otros si fuera necesario.
Un cuerpo sedado con alimentos azucarados y exceso de cafeína, una mente saturada de ideas, un mundo emocional asfixiado por falta de momentos de placer y descanso, no es la fórmula ideal para sentirnos vivos y enérgicos, pero si es la fórmula perfecta para detectar que es momento de elegir hacer algo distinto.
¿Qué quieres hacer distinto este nuevo año?
Recuerda que la calidad de tus pensamientos, y las emociones en las que habitas son alimento puro a tus niveles de energía, no todo se trata de la alimentación o actividad física (aunque es un elemento clave también).
Cuéntame ¿Cuál es tu principal propósito o intención?
Y por favor, dile adiós a las listas largas de metas (ya sabemos que no son muy efectivas), elige de 1 a 2 cosas en las que te enfocarás. En mi caso cuidar mi energía (propósito principal), me lleva a tener una atención en múltiples elecciones de vida cotidiana, más el foco se concentra en todo aquello que me ayuda a tener altos niveles de energía.
¿Te gustó este tema?
¿Es este tema relevante en tú vida, tú liderazgo, tus niveles de confianza contigo mismo?…..por favor compárteme en los comentarios acá abajo si así fuera. Mi compromiso con el aprendizaje y con el compartir mis descubrimientos es elevado, más tener tu feedback lo hace aún más divertido.
¡Éxitos!
Maru García Marín
Coach, Mentor y Trainer en Gestión Emocional y Liderazgo
PD: En la imagen saliendo de un concierto en la “Grace Cathedral” de San Francisco.
6 Comments
Leerle me hace tan bien y hoy más que hacerme bien me abre los ojos para pensar que recargar y cuidar de mi energía es lo principal y que muchas veces olvidamos es el centro de todo lo que realicemos el la vida cotidiana. Ser mamá con pilas puestas no es nada fácil pero con esto por delante todo se ve de otro color. Buenísimo tema. Saludos Maru.
¡Hola Dina!, me alegra que mi reflexión es oportuna para ti y tu rol de mamá. Ahora toca mantener el enfoque y descubrir nuevas formas de cuidar nuestra energía. Cada uno tenemos necesidades diferentes y ritmos diferentes. Respeta tus ritmos y conocelos más. ¡Feliz 2018!
Hola Maru, gracias por compartir la reflexión nunca me había puesto a pensar acerca de cuidar mi energía, suelo ser de las personas que quiere dar todo sobre todo en el trabajo pero cuando regreso a casa llego agotada y es muy poco lo que brindo a mis seres queridos y a mi persona.