Organizar encuentros con los amigos.
Asistir a invitaciones de fiestas y posadas.
Participar en intercambios de regalos.
Planear viajes familiares o logística para recibir familiares.
Aumentar en el consumo de calorías con antojitos por aquí y por allá.
Planear unos días de vacaciones.
Convivir con lo incómodo de encontrar tráfico a donde quiera que vas.
En esta generalizada y muy común lista de actividades o situaciones comunes en período de Navidad
¿Ya hiciste tiempo para ti y para conectar con tus auténticos deseos?
¿Qué tan hábil eres para disfrutar y estar presente en medio de tantas demandas externas?
Encontrarnos arrastrados por las invitaciones a socializar o cumplir rituales propios de las fechas de navidad, puede ser un motor de tracción que deja escaso tiempo para la reflexión y verdadera conexión emocional con nosotros mismos y con otros. Los excesos y abusos físicos (pocas horas de sueño), alimenticios (bebidas alcohólicas y alimentos altamente calóricos) y financieros (endeudamiento), son algunas de las acciones con las cuales conviviremos en remordimiento mental y emocional durante meses si no tomamos decisiones conscientemente.
Si bien el tiempo de navidad es una fecha ansiada, perder contacto con el ritmo que nos sienta bien para atendernos y cuidarnos en nuestras necesidades es parte del desafío en el cambio de la dinámica del mes de Diciembre y primer semana de Enero.
El aumento en nuestras expectativas sobre cómo deberíamos experimentar los encuentros y las relaciones, es otra decisión que un poco de manera inconsciente compramos con el paquete de “Feliz Navidad” y es como si todos actuáramos con ideas preconcebidas sobre la manera en que deben desarrollarse ciertas actividades y el grado de alegría y plenitud con el que las debemos vivir.
Seguir tu propio ritmo, se trata de mediar entre las demandas externas para socializar y adaptarte a planes grupales/familiares, y la necesaria pausa con nosotros mismos para reconocer lo que nos nutre y enriquece nuestra plenitud.
Si algo de lo mencionado hasta ahora te suena familiar, quiero compartirte mi lista de supervivencia para las navidades (si de supervivencia), pues aunque no estemos dispuestos a aceptarlo, pasan muchas cosas durante la temporada navideña que nos pueden dejar fuera de nuestros ritmos saludables y perdernos la oportunidad de vivir este tiempo como una oportunidad de renovación, encuentro y búsqueda. Te invito a mirar lo siguiente:
Maru García Marín
Coach, Mentor y Trainer en Gestión Emocional y Liderazgo.