Semanas atrás cuando por segunda vez me dirigí a llevar a mi hijo a una guardería-hogar certificada cerca de mi casa en el área de la Bahía de San Francisco, eran tantos mis nervios, que me paré en frente de la casa equivocada, y no conforme con esto, toqué la puerta para sorprenderme con la cara de un desconocido.
Es claro que estaba nerviosa y para ser más específica con miedo a confiar.
Dejar a mi hijo con una persona capacitada, certificada y que para mí luce amorosa son elementos a favor en el proceso de soltar, sin embargo, esos son todos elementos cognitivos que me recuerdo y traigo a mi mente para contrarrestar las ideas catastróficas que la mente tramposa suele crear cuando de atreverse a hacer algo nuevo se trata….. y que mejor forma de descubrir como se desarrolla este “juego mental y emocional”, que aprendiendo a soltar a mi hijo de 13 meses.
El ejercicio emocional de soltar a mi hijo, creo que es la asignación más compleja en mi capacidad de confiar……… Fantasías del tipo: “nadie lo cuidará mejor que yo”, “y si se lo roban” , “y si lo descuidan mientras atienden otros niños”……. sin duda no son de ayuda para cultivar un estado de paz y confianza. Estas y otras ideas son sólo válidas si las alimentas, y elegir no hacerlo, requiere determinación, fuerza emocional y disciplina mental.
Mis más de 15 años como emprendedora, sin duda me han hecho cultivar prácticas de auto-cuidado y productividad que aún atesoro, sin embargo, estoy escribiendo un nuevo capítulo, (más de esto en un futuro artículo).
Aceptar que hay momentos en que no soy la mejor persona para atender y cuidar a mi hijo es un estiramiento emocional complejo ¿porqué?…..porque aún y cuando sé que seré una mejor mamá y persona dedicándome tiempo también para mi, hay que lidiar con la culpa de alejarse…..¿Te ha pasado eso con tu trabajo o proyectos más amados?
Estar cansado y alejarse. Confiar y pedir ayuda. Soltar para cargar energías de una forma distinta. Son todas situaciones que experimenta un líder o emprendedor ambicioso en alguna parte de su camino.
A través del apoyo que ofrezco a líderes, emprendedores y organizaciones es común observar algo muy similar a lo que me está pasando.
Cuéntame: ¿Qué te ayuda a soltar y confiar?, ¿Qué te ha funcionado?
Déjame tus comentarios aquí en el blog, y compártenos tus mejores prácticas cuando de confiar se trata.
¡Éxitos!
Maru García Marín
Coach, Mentor y Trainer en Gestión Emocional y Liderazgo
2 Comments
Retomar la lectura de tu Blog llega a mí como anillo al dedo.
Hemos tenido avances importantes en nuestra nueva etapa de emprendedores. Mantenerme en constante descubrimiento de la capacidad que tiene mi socia para llevar nuestro negocio, me ha hecho soltar y confiar más en lo que estamos haciendo.
Esto me ha llevado horas, días, largos ratos.
Cuando aprovecho el día de acuerdo con lo que he planificado, es cuando puedo soltar todo e ir a descansar con la tranquilidad de haber cumplido mi misión del día.
Otra actividad que me ayuda a soltar, sin remordimientos, es reconocer lo que hayamos logrado hasta ese momento. Premiarnos con algún cumplido o con un café o comida, por haberlo hecho bien, me permite reconocer que vamos bien y que también debo soltar para confiar en otros o, sencillamente, descansar.
Este mundo del emprendimiento es muy bonito y absorbente, por ello necesita que planifiquemos bien para poder soltar en algún momento del día.
La analogía con tu experiencia de madre, es muy cercana a la mía. Puedo recordar cuando dejamos, por primera vez, a nuestros hijos en sus escuelas… Hoy en día, ya confiamos totalmente es lo que hacen allá y en quienes están encargados de sus cuidados y enseñanzas.
¡Qué sabroso reconectar con tus lecturas y traer a colación emociones y decisiones de mi vida!
¡Gracias Maru!
¡Hola Omar!
Felicidades por los progresos y saludos a la socia.
Deseo muy pronto conquistar los niveles de confianza necesarios para soltar a mi hijo y encargarlo a otras personas.
¡Abrazos!