Juega. Parte I

¿Pensando continuamente en tu trabajo fuera del horario o tiempo destinado para trabajar?

Cuando tu energía mental está consumida diseñando estrategias y tácticas para resolver asuntos de tu trabajo (fuera de los horarios diseñados para esto),  es señal de que hay oportunidades de mejora y cambio en la manera como usas tus tiempos para trabajar y para recargar baterías.

Empecemos con el uso del tiempo durante la jornada de trabajo. Veamos si te identificas con algunas de las siguientes:

1. Dejas para último las actividades que más te cuestan trabajo.
2. Te cuesta arrancar tu día y lo combinas con diálogos internos del tipo:¡Ya empecé mal!, ¡No estoy siendo productiva!, ¡Me tengo que esforzar el triple!
3. El desayuno es algo que alcanzas a tener 3 o 4 horas después de  estar activo en tu oficina, y no debido a ayunos conscientes y planificados.
4. La preocupación por tener cosas completadas te consume y no inicias tu día “priorizando actividades”.
5. Cualquier emergencia de otros, se convierte en tu emergencia y te cuesta trabajo decir “No”, “Más tarde” o preguntar ¿Qué pasaría si eso se atiende en 1 hora?

Bien, si una o más de las opciones descritas habla de ti y tus hábitos, el siguiente paso es preguntarte ¿Cómo estás cargando las baterías?

Tener resultados rápidos, y moverte en el modelo mental de “más esfuerzo, más resultado”, es algo que conozco muy bien y que suele ser parte de las reglas del juego de muchos líderes y emprendedores. Años atrás (no muchos) decidí que quería expandir mi liderazgo reinventando mis propias reglas y en esa reinvención mi agenda se revolucionó con ajustes importantes, lo que significó crear espacio de calidad para el JUEGO y el DESCANSO….pero ¿Qué significa jugar  para un adulto?

Es gracioso recordar lo que me sucedió tiempo atrás que me hice esta pregunta ¿Qué significa jugar para mi? ¿Hay juego en mi vida?

Para muchos la respuesta automática va de la mano con un juego de mesa o un deporte, pero si realmente expandimos los horizontes de lo que significa jugar bajo la consigna de “actividades en las que me pierdo y divierto”……..¿encuentras algunas para ti?

Mientras crecimos la estrategia principal para aprender fue a través del juego. El juego crea estados emocionales amigables para que nuestro cerebro esté receptivo al aprendizaje y esto es cierto aún en nuestra edad adulta.

Imagina asumir una tarea complicada de tu trabajo o proyecto profesional, después de un tiempo de calidad para recargar baterías. Imagina como es asumir esas tareas complejas sintiéndote energizado y desapegado a pensamientos pesimistas o constantes cuestionamientos que terminan limitándote.

Bien, si lo que logras imaginar o sentir con las respuestas a estas preguntas te agrada, el siguiente paso consiste en que crees espacio en tu agenda para el juego ¿Cómo es jugar para ti?

Crea una lista de opciones de juego y se paciente contigo mismo si las respuestas no fluyen rápido. Se trata sólo de crear un nuevo foco y explorar con curiosidad.

¿Quieres algunas ideas?

Aquí algunas que funcionan para mi….

1. Tomar fotos con mi celular y documentar memorias de momentos especiales o de la vida cotidiana.
2. Escuchar dos o tres canciones favoritas y cantarlas en voz alta.
3. Crear algunas manualidades o arreglos florales.
4. Preparar una comida sólo con los ingredientes disponibles y crear algo nuevo.
5. Cambiar el orden de mi escritorio o sala.
6. Adoro decorar.
7. Bailar.
8. Cuestiono mi agenda una vez que la tengo armada.
9. Planear visitas a nuevos lugares.
10. Organizar viajes con mi familia dejando margen para improvisaciones.

En la imagen que acompaña esta publicación está mi más reciente momento de juego y diversión…. el festejo del cumpleaños número 70 de mi papá en Napa Valley junto a casi toda mi familia.

¡Segura estoy de que te quieres divertir tanto como yo!

¿Cuéntame que haces para divertirte?….. o…..¿qué te gustaría hacer?

Maru García Marín

Coach, Trainer y Mentor en Gestión Emocional y Liderazgo