Hazlo porque es importante.
Hazlo porque le hará bien a otros.
Hazlo porque es tu responsabilidad.
Hazlo para evitar el caos.
Hazlo para tranquilizar la batalla interna.
Detenerme a observar las innumerables veces que preferiría saltarme o evitar algunas tareas de rutina cotidiana como mamá, en mi trabajo, o con cuidados a mi casa me hace tomar conciencia de lo complejo que es vivir honrando tus necesidades emocionales y físicas sin entrar en antagonismo con ideas o proyectos que guiados por la lógica idealista lucen más importantes.
En días pasados mientras me encontraba facilitando una sesión de coaching grupal en mi curso online de liderazgo femenino, explorábamos como lograr vivir más conectadas con nuestro ser sensual, entendido esto como la tendencia y gusto extendido por los placeres de los sentidos. Consciente de que el acto de vivir en el presente y experimentar el mundo con todos nuestros sentidos provee plenitud y satisfacción surgieron como parte de las reflexiones estas preguntas:
Funcionar como mujeres guiadas por el “deber ser”, y enfocadas en satisfacer estándares y reglas de comportamiento que no siempre están alineadas con quién realmente somos, ha provocado importantes dificultades en el ejercicio de nuestro liderazgo.
Vivir desde el “ser” requiere valentía y claridad de intención para reinventar cada día nuestra capacidad de crear los espacios (trabajos, relaciones, lugares), que mejor reciben a la persona que somos.
Si tu liderazgo fuera juzgado por tú capacidad para SER….. ¿Cómo te encuentras ahora?, ¿Qué cosas sumarías a tu vida si eligieras vivir más desde el “ser” y menos desde el “deber”?
Compárteme tus comentarios acá abajo, me encantará leerte.
Desde mi poder y magia a la tuya,
Maru García Marín
Coach, Mentor y Trainer en Gestión Emocional y Liderazgo